Tratamiento fisioterapéutico personalizado en casa y en la clínica para personas con prótesis de cadera
Una de las primeras cosas que deben aprender las personas que lleven prótesis de cadera es a cuidarla. Después de la operación para el implante de la prótesis comienza una etapa en la que hay que aprender a vivir con un elemento extraño. Por regla general los implantes se asimilan bien, y para que esto siga así es recomendable seguir un tratamiento fisioterapéutico personalizado que atienda a sus necesidades concretas.
Seguramente ya le habrán comentado que casi desde el día después de la operación debe comenzar su tratamiento de rehabilitación. Durante los días que permanezca hospitalizado le explicarán la importancia de recibir los masajes y realizar ejercicios diarios para cuidar su prótesis y recuperar la fuerza y la movilidad de la pierna con prótesis de cadera.
Masajes
Tanto en la clínica como en casa recibirá sesiones de masajes. Podríamos decir que éstos forman la primera parte de un tratamiento de rehabilitación después de una operación de implante de prótesis de cadera. Entre los principales objetivos de los masajes es conseguir que la herida de cicatrice lo antes posible y de la manera más correcta. La acción de los masajes también consigue que los hematomas se elimines más rápidamente y que se active la circulación sanguínea correctamente.
Por otro lado los masajes que irá compaginando con ejercicios fisioterapéuticos durante las sesiones que reciba en su casa le ayudarán a preparar y relajar los músculos para el trabajo y esfuerzo que requieren los ejercicios. El fisioterapeuta tratará de que la piel esté bien hidratada, que los músculos estén flexibles, sin contracturas para poder realizar los ejercicios programados.
Ejercicios
En cuanto a los ejercicios de rehabilitación para personas que acaban de recibir una prótesis de cadera su objetivo es acelerar la recuperación de la movilidad. El tratamiento comienza después de la operación con pequeños movimientos de la zona de la cadera, de la rodilla e incluso del tobillo. Aprenderá a mantenerse de nuevo en pie, a sentarse, incorporarse en la cama, etcétera. Serán pequeños movimientos y ejercicios que le permitirán realizar de nuevo las tareas más cotidianas.
Una vez que esté en casa y hayan pasado más semanas la intensidad de los ejercicios será mayor. Con la ayuda de su fisioterapeuta realizará ejercicios de giros, flexiones y extensiones con y sin resistencia.