La vuelta al trabajo con tu prótesis de rodilla, consejos fisioterapéuticos

Después de haber sufrido una operación para el implante de una prótesis de rodilla la vuelta al trabajo puede parecer un reto complicado y largo de conseguir. Hasta cierto punto puede ser así, al fin y al cabo la rodilla es una parte de nuestro cuerpo muy importante que influye en nuestra capacidad de movilidad.

Los ejercicios de flexión de rodilla le ayudarán a recuperar su forma física.

Por todo esto y, claro, dependiendo del tipo de trabajo que desempeñemos, nuestra vuelta al mundo laboral será más o menos corta. Para conseguir que la recuperación sea la más rápida posible es imprescindible seguir al pie de la letra las indicaciones de su fisioterapeuta.

Los profesionales de la fisioterapia de prótesis como los de nuestras clínicas elaborarán un plan de trabajo diario atendiendo a sus condiciones y necesidades. Si, por ejemplo, para realizar su trabajo necesita conducir, los fisioterapeutas pondrán especial empeño es trabajar los músculos de la pierna izquierda, la del embrague, en el caso de que el implante esté localizado en esta zona.

Para acelerar la vuelta al trabajo deberá ser muy constante en su rehabilitación.

Si  tiene que permanecer mucho tiempo en pie, también habrá que trabajar la musculatura de la pierna no operada, puesto que casi sin darse cuenta cargará el peso del cuerpo en la pierna sana.

Pero los consejos fisioterapéuticos para tratar de volver al trabajo cuanto antes y en las mejores condiciones posibles no acaban aquí. Algunos de estas recomendaciones que le dará su fisioterapeuta le parecerán obvias, pero aprenda a valorarlas porque a menudo olvidamos lo más evidente y acabamos cometiendo errores tontos que, sin embargo, pueden costarnos muy caros. Recopilamos algunos de los más comunes:

• Si conduce, haga pausas cada dos horas o menos, en cuanto sienta cualquier tipo de molestia y realice ejercicios de estiramientos y de relajación de la pierna.
• Si permanece sentado mucho tiempo, levántese de vez en cuando y dé pequeños paseos. Mientras permanece sentado, haga ejercicios como estriar la pierna hasta dejarla  recta e incline la punta del pie hacia sí.
• Antes de agacharse trate de reforzar o desentumecer su rodilla, así evitará dolores y otras complicaciones ocasionadas por la falta de movilidad.